Latte Cremoso
El latte es una de las bebidas de café más populares en todo el mundo. Consiste en un espresso suave combinado con leche vaporizada y una capa de espuma cremosa. Con la técnica adecuada, puedes crear un latte tan delicioso como el de tu cafetería favorita, e incluso aprender a hacer arte latte básico.
Ingredientes
- 18g de café para espresso (molienda fina)
- 180-200ml de leche entera fría (o alternativa vegetal)
- Máquina de espresso o cafetera moka
- Vaporizador de leche o batidor de leche
- Termómetro (opcional)
- Jarra para leche
- Taza para latte (240-300ml)
Preparación
- Prepara el espresso. Extrae un shot doble de espresso (aproximadamente 60ml) usando tu máquina de espresso o cafetera moka. Si usas moka, prepara aproximadamente 60ml de café concentrado.
- Prepara la taza. Vierte el espresso en una taza grande para latte. Si deseas, puedes precalentar la taza con agua caliente y luego secarla antes de añadir el espresso.
- Prepara la leche. Vierte la leche fría en una jarra de metal. La leche debe estar fría del refrigerador para obtener mejores resultados.
- Vaporiza la leche. Si tienes un vaporizador:
- Purga el vaporizador para eliminar cualquier condensación.
- Sumerge la punta del vaporizador justo debajo de la superficie de la leche y actívalo.
- Mantén la punta cerca de la superficie para incorporar aire (esto crea la microespuma).
- Después de unos segundos, sumerge más la punta para calentar toda la leche sin añadir más aire.
- La temperatura ideal es entre 60-65°C. Si no tienes termómetro, detente cuando la jarra esté caliente al tacto pero no queme.
- Alternativa sin vaporizador: Si no tienes vaporizador, calienta la leche en el microondas o en una cacerola hasta que esté caliente pero no hirviendo. Luego usa un batidor de leche, batidora de mano o un frasco con tapa para crear espuma.
- Prepara la leche para verter. Golpea suavemente la jarra contra la encimera para eliminar burbujas grandes y gira la leche en la jarra para integrar la espuma con la leche y crear una textura brillante y sedosa.
- Vierte la leche. Sostén la taza ligeramente inclinada y vierte la leche lentamente desde cierta altura. A medida que la taza se llena, acerca la jarra a la superficie y vierte más rápido, moviendo la jarra para crear un patrón básico (como un corazón).
Consejos para el Latte Perfecto
Calidad del espresso: Un buen latte comienza con un buen espresso. Asegúrate de que tu espresso tenga un buen equilibrio, no esté sobre-extraído (amargo) ni sub-extraído (ácido).
Temperatura de la leche: No sobrecalientes la leche. A temperaturas superiores a 70°C, las proteínas de la leche se desnaturalizan, lo que afecta negativamente al sabor y la textura.
Textura de la leche: La clave para un buen latte es la microespuma: pequeñas burbujas que dan a la leche una textura aterciopelada. Evita las burbujas grandes que hacen que la espuma sea áspera.
Arte latte: Para crear un corazón simple, vierte la leche en el centro del espresso, luego cuando la taza esté casi llena, levanta ligeramente la jarra y atraviesa rápidamente la superficie para crear la punta del corazón.
Tipo de leche: La leche entera funciona mejor para crear espuma debido a su contenido de grasa. Si prefieres alternativas vegetales, las de avena y soja especiales para baristas dan buenos resultados.